En ocasiones, pueden ocurrir accidentes durante la jornada laboral del socorrista, y debemos estar informados y preparados para saber cómo actuar ante ellos. Las quemaduras en la piel pueden ser un accidente de alto riesgo si no conocemos el procedimiento que se debe realizar. En SOS Andrómeda te contamos el protocolo de actuación ante este tipo de accidentes.
Entre las causas que pueden originar una quemadura encontramos: fuego, electricidad, productos químicos, líquidos hirviendo, gases…
Las quemaduras pueden clasificarse en tres tipos dependiendo de la profundidad de las mismas:
La gravedad de las quemaduras depende de la extensión de la zona quemada y la profundidad de ésta, aunque la edad del accidentado, la causa y la zona afectada (cara, pies, genitales) influyen notablemente en la evaluación.
Se consideran LEVES las quemaduras de primer grado en un 30% de la superficie corporal total o las quemaduras de segundo grado en un 10% de la superficie corporal total.
Dependiendo del tipo de quemadura, la gravedad de la misma y la causa de origen, deberemos tomar una serie de medidas u otras, aunque por lo general estas son las pautas a realizar:
Este procedimiento de actuación puede ser muy importante para reducir las posibles lesiones.