Victoria Vargas es una marteña de 25 años que vio anunciado el curso de socorrismo de SOS Andrómeda en redes sociales y, motivada por la experiencia de uno de sus familiares en este sector, enseguida se animó a inscribirse en él.

Como otros socorristas que han llevado a cabo la preparación con nosotros, Victoria no quiso dejar escapar las ventajas que le proporcionaba realizar el curso inscribiéndose a través del Instituto Municipal de Formación y Empleo (IMEFE).

Graduada en música, esta joven afirmaba que había sido la parte de natación la que más encajaba con su perfil y gustos personales, y confesaba que a pesar de tener cierta dificultad en algunas pruebas físicas, con constancia pudo terminar el examen con los resultados deseados. “Si tuviera que destacar lo que más me costó fue la forma en cómo sacar un cuerpo del agua, estuve unos días preocupada pero al final lo conseguí con éxito.”

Victoria es otro ejemplo de profesionalidad en su puesto como socorrista, y como consejos de prevención de riesgos, destacaba la importancia de ser cauteloso en el recinto de la piscina, y prudente con la exposición al sol que tantos problemas causa en la piel, especialmente en verano.

 “El curso te abre las puertas al mundo laboral en principio durante unos meses pero con suerte puede convertirse en tu profesión” comentaba esta joven cuando le preguntábamos por qué recomendaría el curso a otra persona.

¡Gracias Victoria por formar parte de la plantilla de SOS Andrómeda!